En un divorcio contencioso cada cónyuge abonará su propio abogado y procurador, mientras que en proceso amistoso el pago de los costes es una de las decisiones en las que los cónyuges tendrán que ponerse de acuerdo.
En un proceso de divorcio contencioso cada uno tendrá que elegir y contratar a sus propios profesionales y abonar sus minutas. En cambio en un mutuo acuerdo, los esposos podrán ir con profesionales independientes de manera que cada uno abone los
suyos, o compartirlos y acordar la proporción de pago de las minutas y honorarios.
Indice de Contenido
Costes en un Divorcio de Mutuo Acuerdo –
Los costes de un divorcio de mutuo acuerdo son el abogado y el procurador.
En España existe libertad de mercado para que cada profesional fije sus precios de honorarios y existe la obligación del letrado de informar detalladamente al cliente de los costes del proceso.
En un divorcio de mutuo acuerdo existen tres posibilidades en relación a quien abona los costes:
- Que cada uno cuente con su abogado: Cada cónyuge puede contar con su propio abogado e incluso su propio procurador. La ventaja de que cada uno tenga su propio abogado es que cada abogado podrá seguir defendiendo a su cliente, pues el abogado no es compartido.
- Que compartan abogado: Es la opción más frecuente en un divorcio amistosos, en el que ambos cónyuges confían su asesoramiento y tramitación en un sólo profesional, pudiendo abaratar los costes al no tener que duplicar el pago de profesionales. Se puede acordar la proporción de pago de los honorarios profesionales.
- Que un cónyuge vaya con abogado y el otro no: Existe una posibilidad de tramitación que es la demanda a instancia de uno de los cónyuges con el consentimiento del otro. En este caso uno de los cónyuges no contará formalmente con abogado ni procurador, sin perjuicio de que haya podido recibir el asesoramiento que haya considerado oportuno aunque el proceso se presente formalmente por uno sólo de los cónyuges con su abogado y procurador.
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Costes en un Divorcio Contencioso –
Los costes de un divorcio contencioso son principalmente abogado y procurador.
En un divorcio contencioso cada cónyuge concierta su asesoramiento por medio de abogado y procurador ya sea de oficio o de pago.
En el caso de ser de pago o también denominada de confianza, el abogado tendrá la obligación de informar con detalle de los costes del proceso así como de los medios alternativos de solución de conflictos, los llamados MASC.
El precio medio de un divorcio contencioso en España es de entre 1.500 y 6.000 euros.
En función de la complejidad o desarrollo del proceso puede ser mayor o menor.
Existe gran diferencia de coste entre unos abogados y otros en el sector de derecho de familia y la gran dificultad en la práctica para el consumidor y usuario es poder comparar entre diferentes profesionales.
Algunos abogados ofrecen la primera consulta gratuita en la que informan al cliente de los costes previsibles del proceso, mientras que otros tienen un precio que suele oscilar entre los 50 y 200 euros.
El gran problema que limita la comparación entre profesionales en derecho de familia es que en ocasiones poder conocer el precio de diferentes abogados ya supone un desembolso de las correspondientes citas.
Muchos despachos suelen indicar que “si se contrata el precio de la consulta se descontará”, pero es algo que realmente lo que hace es condicionar la posible contratación.
Gastos Legales y Administrativos –
Un divorcio en España no tiene ningún coste de gasto de tasa judicial, por tanto ni el Juzgado cobrará nada por divorciarse ni el Registro Civil por anotar el divorcio.
Otra cuestión es que para ciertos trámites como es la publicación por edictos de la resolución a la parte demandada en caso de que no comparezca y se declare en situación de rebeldía procesal, sí que suponga un gasto para el cónyuge demandante, pero se trata de situaciones muy específicas.
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AYUDADMEPosibles Excepciones y Decisiones Judiciales –
En un divorcio contencioso cada cónyuge tendrá que abonar los costes de su abogado y procurador, pero existe una excepción, la imposición de costas.
El derecho de familia el proceso de guarda y custodia, separación o divorcio no suele llevar aparejada la imposición de costas con independencia de que se resuelva por el juez lo que pide el cónyuge demandante o el demandado.
En España la justicia es taifática, de manera que a veces algunos Juzgados tienen criterios o prácticas que sí optan por imponer las costas a la parte que vea desestimadas totalmente sus pretensiones.
En caso de imposición de costas imperará la limitación de costas de un tercio de la cuantía, lo que no ocurre en caso de que se impongan las costas con apreciación de mala fe procesal, caso en el que excepcionalmente no será aplicable dicha norma de límite de costas.
Las decisiones judiciales suelen ser homogéneas pero por desgracia en ocasiones algunos se desmarcan con criterios propios que crean cierta incertidumbre e inseguridad a los litigantes.
Es una consecuencia de someterse a un proceso de divorcio litigioso, un incentivo más para llevar a un entendimiento.
Consejos para Minimizar los Costes del Divorcio
El mejor consejo para minimizar los costes del proceso de divorcio es llegar a un acuerdo.
El problema es que en España aún no existe una cultura de divorcio amable y saludable, de manera que un 20% de los divorcios siguen siendo contenciosos lo que multiplica costes, plazos y enfrentamientos.
El mejor consejo es reducir la tensión antes de entrar en la mediación, pues la mediación no es efectiva con niveles elevados de tensión.
Los constes del divorcio se reducen con un acuerdo amistoso, el mejor consejo es acudir a un abogado de confianza y en paralelo a un psicólogo familiar para que pueda reconducir la actitud de ambos cónyuges y situarles ante su nueva vida como divorciados.
Sobre todo en los casos en los que existen menores, hay que ahorrar costes económicos, tiempo y enfrentamientos, pues todo ello puede perjudicar a nuestros hijos provocando daño familiar.