No soporto a mi marido ni a su familia

Cuando no soportas a tu marido ni tampoco a su familia existirá un problema estructural que habrá que tratar de corregir.

Realmente la persona que lo pasa mal en primer término eres tú, de manera que debes de valorar si se pueden superar las diferencias o si son tan fuertes que la relación no tiene futuro.

La gran duda de muchas mujeres que quieren separarse de su marido es si me separo no tengo dónde ir, pues bien, siempre habrá un lugar, una solución y una alternativa mejor a una mala convivencia familiar.

No soporto a mi marido ni a su familia

No te precipites, antes de divorciarse lee esto y analiza con calma tu situación familiar. La familia y el matrimonio debería de ser un lugar en el refugiarnos de las cosas malas del día a día y compartir las buenas. Si te ocurre todo lo contario y resulta que cuando pasas por la puerta de tu casa es cuando empieza el malestar, la solución, de ser un hecho consolidad, es la separación sana y a tiempo.

Cuando sea viable y se puedan solucionar los problemas, merecerá la pena, pero cuando no sea así, debemos de ser realistas y no engañarnos a nosotros mismos.

Con nuestro marido formamos un matrimonio y familia independiente de la familia de origen. Si la relación es mala tanto con el marido como con su familia, nuestra familia política, al final tenemos un gran problema pues en ocasiones se posicionan en posturas enfrentadas en la que cada cosa grande y pequeña puede ser un punto de enfrentamiento e inflexión.

Una familia y matrimonio no puede desarrollarse en un contexto de tensión y malestar.

Si como mujer te sientes excluida por tu marido y familia política, debes de buscar el origen y las posibles soluciones, partiendo de la base de que no se puede pretender cambiar a nadie, pues en muchos casos se entra en guerras en las que unos quieren cambiar el comportamiento de otros, destinando gran energía a ello y acabando con un gran desgaste que nos podríamos ahorrar con inteligencia emocional y comunicación clara, directa y no distorsionada.

¿No soportas a tú marido y a su familia?

¿Qué prefieres mantener esa situación o la separación?

Una separación nunca es algo inicialmente deseado, pues lo deseable sería que un matrimonio siguiera junto. Pero cuando es necesario no estamos ante una opción, sino ante la única posibilidad saludable si se gestiona a tiempo y de manera amistosa. Cuando no soportas a tu marido y familia política debes de tratar de mejorar la relación y conseguir superar los problemas, pero de no ser posible, no hay que tener miedo al divorcio, sino en todo caso a un mal divorcio contencioso o una mala convivencia.

Abogados de Divorcieitor.

Matrimonio tóxico con hijos

Un matrimonio tóxico con hijos puede ser un foco de conflictos para todos los miembros de la familia.

Las relaciones familiares tóxicas son el caldo de cultivo de comportamientos disfuncionales en todos los miembros de la familia tanto hacia dentro, como hacia fuera.

Cuando los cónyuges se tratan mal y tienen un matrimonio basado en valores o comportamientos inadecuados, suelen expandir los efectos a todos los miembros de la familia de manera que no sólo afecta a su relación, sino que en en un matrimonio tóxico con hijos los mayores afectados son los niños

Ser hijo en un hogar tóxico en un verdadero trauma. Es un drama sentir que como niños formamos parte de una familia que no se trata bien, que pierde las formas y que no se quiere en base a relaciones estables de cariño, amor y respeto, sino todo lo contrario.

En ocasiones los matrimonios tóxicos sí que se quieren, pues muchos de ellos en ocasiones tienen fases de idealización en la que parece que son una pareja perfecta, pero no compensa con otros comportamientos tóxicos.

Matrimonio tóxico

En este contexto es inevitable pensar si se quiere mantener el matrimonio a sabiendas de que consideramos de que cuanto menos en parte es tóxico, o deseamos cambiar de vida y que con la ruptura pasemos a una separación o divorcio. Por eso, antes de divorciarse lee esto y piensa en qué quieres para tu vida y la de tu hijo y si es saludable la vida que tienes y cuál quieres.

En ocasiones tenemos parte de la culpa de que el matrimonio sea tóxico. Si eso fuera así, aunque sea una pequeña parte, pero entendemos que es así, también tenemos y contamos con una parte de la solución.

Si tenemos un matrimonio tóxico con hijos y lo dejamos y nos divorciamos pero por el motivo que sea, pasamos a comenzar otro matrimonio tóxico, tal vez el divorcio no sea la solución, sino que la mejor alternativa sería recibir apoyo profesional por parte de psicólogos y terapeutas de pareja que ojalá puedan salvar el matrimonio.

Un matrimonio tóxico se construye, pero la parte tóxica también se puede destruir para construir en su lugar relaciones saludables. Un matrimonio tóxico no se construye de un día para otro. Un matrimonio saludable que lo reemplace menos. Es un esfuerzo del día a día de pequeños y grandes pasos que remplacen la falta de respeto y consideración por educación, empatía y compromiso generoso.

Divorcieitor

Porque cada vez aguanto menos a mi marido o mujer

Las dificultades para aguantar la convivencia matrimonial puede ser un síntoma o aviso de grave deterioro de la relación.

Puede tratarse de un indicio de que el matrimonio tiene problemas estructurales y puede acabar en separación o divorcio.

El hecho de que una matrimonio acabe en separación o divorcio no es un drama, en cambio, lo que sí que puede ser un drama, es mantener un matrimonio o divorcio contencioso. Es por ello que tanto los matrimonios que están juntos, como los que están separados,

No soporto a mi pareja ni a su familia

Un gran número de problemas matrimoniales se derivan de terceras personas y no, en origen, de la relación directa entre cónyuges. Por ejemplo, si la frase repetida es, no quiero vivir con los hijos de mi pareja, ya sabremos cuál es el problema. Si decimos, tenemos problemas de dinero y no puede vivir así, habrá que analizar la situación económica.

Solemos saber cuál es el problema, pero lo importante es no engañarnos y enfrentarnos a la realidad y dejarnos ayudar con terapia psicológica si es posible, asesorarnos de nuestros derechos y obligaciones para tomar las decisiones acertadas.

No soporto a mi marido o mujer
Problemas de convivencia familiar

No quiero vivir con mi marido o mujer

Si no quiere convivir con su marido o mujer no tiene la obligación de hacerlo.

Con independencia de cuál sea su estado civil, tiene plena libertad para fijar su domicilio. No existe el abandono de hogar. Es indiferente el abandono de hogar sin esta casados, estando casados o con hijos o sin ellos. Son cuestiones diferentes.

Cada persona es libre de fijar su domicilio y de hecho ante una mala convivencia lo más prudente es cesar en los conflictos con separación de cuerpos, para evitar enfrentamientos. Otra cuestión es que tengan ambos progenitores que cumplir con las publicaciones con sus hijos y atenderlos en cualquier caso, y de que existan obligaciones y cargas familiares a las que habrá que hacer frente.

Puede contar para el asesoramiento con Divorcieitor. No es cuestión de tomar una decisión en caliente, pues se puede equivocar, sino una decisión con la certeza de saber que hacer aquello que realmente, quiere, previo conocer cada detalle de los que confluyen en su pareja, matrimonio y familia.

Cómo saber si tu matrimonio ya no funciona

Un matrimonio no funciona cuando la convivencia y el tiempo compartido deja de ser algo querido y satisfactorio y el tiempo separados pasa a ser el que nos hace sentir mejor.

Cuando sentimos que estamos mejor separados que juntos.

En aquel punto del matrimonio en el que lejos de compartir un proyecto deseado, pasamos a replantearlo y sentir dudas e inseguridades.

¿Cómo saber si un matrimonio no tiene futuro?

Un matrimonio no tiene futuro cuando nos planteamos plantes y proyectos individuales y tendemos a evitar aquellos compartidos.

Un matrimonio debe de ser libre y querido. Cunado un matrimonio se estanca y deja de ser aquel proyecto inicial, debemos de replantearnos si tiene, o no, futuro.

Tal vez para nosotros pueda tener futuro, o para nuestra pareja. pero un matrimonio no tendrá realmente futuro ni será viable si uno de los esposos no siente que tenga recurrido en el tiempo.

¿Por qué se acaba un matrimonio?

Un matrimonio se acaba por la decisión de uno de los esposos que por sus motivos personales e íntimos llega a la conclusión de que ha querido dejar de compartir su proyecto sentimental con su cónyuge.

¿Cómo acabar un matrimonio que ya no funciona?

La manera de acabar un matrimonio cuando ya no funciona, es con respecto, lealtad y sinceridad.

Yendo de frente y tratando de enfocar la cuestión de una manera lo más saludable posible, para evitar que la rabia y los reproches que puedan afear la ruptura, que ya de por si sola suele ser bastante dolorosa, como para complicarla aún más sin necesidad.

Firmar capitulaciones matrimoniales ante Notario

¿Cómo cambiar el régimen económico matrimonial?

¿Cómo cambiar el régimen económico matrimonial?

Para cambiar el régimen económico matrimonial se debe otorgar escritura pública de capitulaciones matrimoniales ante notario.

Firmar capitulaciones matrimoniales ante Notario
¿Cómo cambiar el régimen económico matrimonial?

Las capitulaciones matrimoniales pueden otorgarse en cualquier momento del matrimonio e incluso antes de celebrar del matrimonio. Se podrán realizar tantos cambios de régimen económico matrimonial como los esposos quieran debiendo de delimitar el tiempo en el que se inicia y termina cada uno de ellos para determinar qué bienes y deudas forman parte de cada periodo y régimen económico matrimonial.

Para el caso de que se otorguen las capitulaciones matrimoniales, para que sean efectivas y aplicables deberá de contraerse matrimonio en el plazo de un año desde que se han otorgado las capitulaciones.

Modificar régimen económico matrimonial

Antes de modificar el régimen económico matrimonial debe de entender en qué consiste cada régimen. Los principales son el de bienes gananciales y el de separación de bienes, aunque existen otros minoritarios como el de participación.

En lo que respecta al régimen de bienes gananciales es importante diferenciar entre disolución y liquidación de gananciales.

Muchos clientes quieren cambiar su régimen económico matrimonial sin llegar a entender realmente en qué consiste el que tienen actualmente y quieren terminar, ni el que quieren iniciar.

Por ello, el asesoramiento es muy importante pues únicamente cunado una persona sabe qué derechos, obligaciones y responsabilidad se desprende de un determinado régimen económico matrimonial y cómo afecta a sus bienes y cargas, se podrá tomar una decisión reamente libre y consciente.

Como cambiar a separación de bienes

Para cambiar el régimen matrimonial y pasar a separación de bienes habrá que otorgar capitulaciones matrimoniales. Una cuestión que es conveniente conocer, es que un matrimonio que se ha separado (no divorciado) y se reconcilia formalmente, pasa a ostentar separación de bienes con independencia de cuál era el su régimen económico matrimonial antes de la separación.

Desde el punto de vista de nuestros abogados, el régimen de separación de bienes es el que mejor se adapta a las familias en la actualidad al haber superado la desigualdad precedente en al que la mujer no había accedido en condiciones de igualdad al mercado laboral.

Además, el régimen de separación de bienes es el que mejor se entiende y es más sencillo gestionar, pues cada uno de los esposos tendrá los derechos y obligaciones patrimoniales que adquieran o contraigan ya sea a título individual o en un maternidad proporción junto a otras personas, sea su cónyuge o cualquier otra persona.

Mi marido o mujer quiere hacer separación de bienes

Si su marido o su mujer quiere hacer separación de bienes, deberán de estudiar si se trata de una decisión consensuada, deseada y correcta. Un matrimonio debe de tomar conjuntamente la decisión de mantener un determinado régimen económico matrimonial o en su caso modificarlo, no puede pretender imponerse por parte de un cónyuge a otro.

Además, antes de tomar una decisión, para evitar errores y precipitación, lo mejor es asesorarse y tener un amplio conocimiento de las peculiaridades de cada régimen y entender como afectan a sus relaciones patrimoniales pasadas, presentes y futuras.

¿Cómo se hace separación de bienes una vez casados?

Para otorgar separación de bienes una vez casados, al igual que las capitulaciones prematrimoniales, no es necesaria la intervención de abogado, eso sí, siempre será recomendable.

Una vez tomada una decisión, deberán de solicitar cita en Notaria. La documentación necesaria será la de los carnets de identidad de ambos, en su caso las capitulaciones matrimoniales previamente otorgadas y el libro de familia. Además, será muy conveniente un certificado literal de matrimonio actualizado.

¿Cómo cambiar de separación de bienes a gananciales?

El trámite es muy sencillo, siendo el mismo el de pasar de bienes gananciales a separación de bienes que el de pasar de separación de bienes a gananciales. Pueden existir sucesivos periodos sujetos a a un determinado régimen económico. Lo razonable es que no existan constantes cambios, pero potencialmente, se pueden realizar tantos como estimen conveniente los cónyuges.
A pesar de ello, constantes cambios de régimen matrimonial puede suponer dificultad y complejidad para entender el régimen económico al que están sometidos los deferentes bienes y cargas.
Por poner un ejemplo sencillo en términos generales:
Si una personal soltera o casada en régimen de separación de bienes adquiere un inmueble concertando un crédito hipotecario el inmueble y la hipoteca le serán propios.
Si esa persona posteriormente se casa en gananciales o cambia su régimen económico para pasar a ostentar gananciales, desde que están vigentes los gananciales, entre otras cuestiones, la hipoteca será abonada por la sociedad de gananciales y en su caso los frutos (si por ejemplo estuviera el piso alquilado) le corresponderían a la sociedad de gananciales, que es de ambos cónyuges.
Por ello, en ocasiones situaciones percibidas como simples, jurídicamente tienen consecuencias complejas.

Capitulaciones matrimoniales separación de bienes
Plazo y precio de capitulaciones matrimoniales

Precio y plazo cambio de régimen matrimonial

El precio de una escritura de capitulaciones matrimoniales suele costar unos 75 euros y el plazo es tan rápido como los cónyuges tarden en recopilar la documentación y la Notaria tenga disponibilidad para la firma.

¿Cuánto cuesta cambiar régimen matrimonial?

A pesar de que las Notarias apliquen los mismos criterios arancelarios existen múltiples cuestiones variables que harán que el precio sea mayor o menor. Dependerá del número de folios y del número de copias simples y autorizadas que sean ermititas. Lo normal es que el precio sea de unos 75 euros, pero perfectamente pueden ser 50 euros o también 100 euros.
El precio no debe de ser algo que le preocupe o condicione, usted debe de cambiar de régimen económicos matrimonial si es procedente y lo más importante es tomar una decisión verdaderamente consciente.
Por ello, le recomendamos que antes de tomar una decisión consulte con nuestros abogados o con cualquier abogado que sea de su confianza, en España tenemos la inmensa suerte de contar con excelentes profesionales y lo importante no es el letrado, sino que usted entienda correctamente sus derechos y obligaciones, pues una decisión errona puede suponer grandes perdidas patrimoniales para la familia.
No tomar una decisión y no cambiar el régimen matrimonial, implícitamente también es una decisión, por tanto, debe de analizarse de manera individualizada sus circunstancias e intereses familiares, sin que sea aplicable un mejor o pero régimen general, sino que habrá un régimen más o menos conveniente y adecuado para cada familia.

Cuanto se tarda en hacer separación de bienes

El plazo no es una traba para poder  otorgar capitulaciones matrimoniales para, como se suele decir coloquialmente, «hacer separación de bienes» o «bienes gananciales», pues si se tiene la documentación y las cosas claras, se puede firmar en la misma semana o incluso en pocos días. Depende de la disponibilidad de la Notaria y la posibilidad de conciliar con los horarios de ambos esposos, pues ambos deben de firmar las capitulaciones matrimoniales.

¿Qué pasos debo dar para llevar a cabo una separación de bienes?

  • El primer paso es asesorarse y tener una decisión consciente y no precipitada, será muy conveniente consultar un abogado especializado y no está de más saber que tiene también la posibilidad de preguntar en la propia Notaria cualquier duda respecto de las consecuencias jurídicas del cambio de régimen matrimonial proyectado.
  • Contactar con la Notaria para pedir cita y aportar la documentación preceptiva.
  • Firmar la escritura ante notario.
  • Inscribirla en el Registro Civil.

Es importante tener en cuenta que las capitulaciones matrimoniales tendrán efecto entre los cónyuges desde el momento del otorgamiento de la escritura, pero no surtirá efecto respecto de terceros hasta que no sea oportunamente anotada en el Registro Civil en el que conste inscrito el matrimonio.

Pasar de bienes gananciales a separación de bienes
Cambiar régimen económico matrimonial

¿Qué es mejor gananciales o separación de bienes?

Como ya hemos indicado más arriba, no hay un régimen económico mejor o peor que otro, sino que cada uno tiene grandes diferencias que harán que sean la mejor opción para un determinado matrimonio y un determinado momento.

Cada matrimonio es diferente y cada momento de un mismo matrimonio puede tener necesidades especiales, de manera que es recomendable conocer lo mejor posible la diferencia entre bienes gananciales y separación de bienes (y en su caso otros alternativos) para poder adaptarlo a las necesidades de cada familia y de cada momento de cada familia.

Desde nuestro despacho tratamos de concienciar a las familias de que el asesoramiento es muy valioso. Hemos llegado a participar en la Feria de 1.001 Bobas de IFEMA y muchas parejas que proyectan casarse, perciben el tema de su régimen económico matrimonial como algo incómodo y cuyo conocimiento y análisis puede generar desconfianza y malestar de pareja.
Se repiten frases similares a:

«Nosotros nos casamos en bienes gananciales, nuestro matrimonio es para siempre». 

¿Separación de bienes? ¿Es que no confías en mí?

No hay que tener miedo al asesoramiento, sino a tomar decisiones mal asesorado pues puede provocar errores, perdidas y conflictos.

Abogados de familia para asesorar a las familias que lo necesitan y ayudar a potenciar el asesoramiento preventivo y que potenciando el entendimiento de los derechos y obligaciones legales se alcancen entendimiento positivos para las familias.

Buen divorcio para un mal matrimonio

Un buen divorcio es importantísimo para superar un mal matrimonio.

 

 

Cada vez son más las familias que deciden poner fin a un matrimonio que han dejado de querer mantener.

Sin más, un buen divorcio a tiempo para un mal matrimonio que es aguantado y soportado de manera insatisfactoria.

Ha cambiado mucho la mentalidad matrimonial a lo largo de los años, pudiendo destacar:

  • La media de edad ha subido en la última década 5 años.
  • El número de divorcios aumenta hasta superar el 60% en proporción al número de matrimonios.
  • El número de divorcios amistosos están aumentando en los últimos años hasta superar el 80% del total.

Por ello como respuesta a un mal matrimonio se está ofreciendo un buen divorcio, si tabús, de mutuo acuerdo y sin prejuicios de edad o sexo.

A continuación intentaremos transmitir qué es para nosotros un mal matrimonio y cómo podría o debería de resolverse mediante un buen divorcio amistoso, justo y respetuoso.

¿Qué es un mal matrimonio?

Mal matrimonio es aquel que no se quiere mantener sino que se soporta de manera insatisfactoria.

Los malos matrimonios son aquellos que se toleran pero no se quieren.

No es que existan buenos o malos matrimonios, pues todos los matrimonios son fruto de la voluntad concurrente de ambos novios en el momento que deciden contraer matrimonio, pero hay una gran parte que evolucionan de una manera diferente a la que satisface o colma o los cónyuges y es a eso a lo que nos referimos con un mal matrimonio, un matrimonio con desavenencias insalvables.

¿Qué hacer con un mal matrimonio?

El matrimonio y la familia debe de ser algo bueno.

Cuando por desgracia ha dejado de ser nuestro apoyo y ha pasado a ser nuestra debilidad, algo estamos haciendo mal. En ese momento deberemos de ser realistas y pensar desde el punto de vista de ambos cónyuges si ambos son felices y la relación tiene futuro.

En ocasiones el matrimonio es viable y tiene futuro pero cuenta con dificultades derivadas de las circunstancias familiares: Situación personal, relación emocional, personalidad, condicionamiento internos y externos… etc.

Pueden existir dificultades en un mal matrimonio, pero ese no es el problema, pues en toda relación existen complicaciones, lo importante es tener la madurez suficiente como para darse cuenta de si se pueden y quieren superar o si se prefiere terminar la relación.

La relación es de dos y por tanto ambos tienen que seguir queriendo la relación, no es cuestión de que cambie el otro y nosotros quedemos esperando como meros espectadores.

La relación es de dos y por tanto en ambos recae la responsabilidad de mantener un matrimonio saludable y querido o un matrimonio que se torna tóxico e insano y que ambos padecen como si fuera algo que no depende de si mismos.

A un mal matrimonio que no se pude salvar y mantener, la mejor opción es el divorcio amistoso de mutuo acuerdo. Nuestros abogados, son expertos en dichos procesos y las consultas son gratuitas, puede preguntarnos sin ningún tipo de reparo.

¿Cómo conseguir un buen divorcio?

Para conseguir un buen divorcio lo primero es saber divorciarse a tiempo de que la relación sentimental se degrade tanto que haga que la ruptura se torne traumática con enfrentamientos fruto de haber llegado al límite.

Cuando un matrimonio va mal, la primera opción no es el divorcio, sino que la primera opción sería intentar reavivar ese matrimonio, pero para el caso de que no sea posible, divorciarse de mutuo acuerdo lo antes posible.

Existen dos cuestiones que inciden en el momento del divorcio y que en cada caso habrá que tener en cuenta de manera diferente:

  • En el momento de la ruptura los sentimientos encontrados están aún latentes y en ocasiones no es posible llegar a un acuerdo «en caliente» pues puede que alguno de los cónyuges no haya aceptado la separación.
  • En el momento de la ruptura es el mejor momento para dejar todo resuelto, pues en ocasiones con el paso del tiempo la relación pierde perspectiva y lo que en el momento de la ruptura estaba claro, puede convertirse con el paso del tiempo en puntos de vista distintos y más difícil de compatibilizar.
  • Además, con el paso del tiempo los cónyuges tienden a rehacer sus respectivas vidas y en ocasiones las nuevas influencias e injerencias pueden dificultar el buen divorcio amistoso.

Por todo ello, a la pregunta de: ¿Cómo conseguir un buen divorcio?

La respuesta sería con mediación.

Con tendencia al entendimiento favoreciendo el no deterioro de la relación y el entendimiento claro, sincero y respetuoso.

En muchos procesos de divorcio la gran dificultad es que los cónyuges acepten la propuesta de divorcio del otro superando prejuicios emocionales y malentendidos.

El momento del divorcio es muy delicado y por ello deberemos de hacer un especial esfuerzo por ponernos en el lugar de nuestro cónyuge sin presionar pero tampoco sin relajar tanto la relación que se pierda el contacto y la voluntad de firmar un divorcio de mutuo acuerdo amistoso.

Buen divorcio

¿Al mal tiempo buena cara?

No.

Al mal matrimonio sin solución, el buen divorcio.

Es mejor un buen divorcio que un mal matrimonio.

Consecuencias del matrimonio

Efectos del matrimonio
Consecuencias del matrimonio

Cuando dos personas deciden libremente contraer matrimonio tienen claro que quieren compartir sus vidas, pero, ¿realmente sabe cuáles son los efectos legales que se derivan de contraer matrimonio?

En los despachos de abogados cuando los cónyuges vienen a divorciarse traen un punto de partida erróneo de su situación jurídica. Saben bien que quieren y que no quieren pero verdaderamente no tienen muy claro el alcance de sus derechos y obligaciones familiares.

Es frecuente haber hecho un tipo de vida condicionado por los derechos y obligaciones que se consideraba que se tenía desde la ignorancia y que cuando llega la ruptura verdaderamente no son así.

El problema es que normalmente la gente se casa sin sopesar las consecuencias legales que ello supone.

Al casarse dos personas no sólo hacen oficial su propósito de compartir sus vidas, sino que verdaderamente entran en la institución del matrimonio lo que conllevará pasar a tener un determinado régimen económico matrimonial y una serie de vinculaciones de las que no suelen ser conscientes inicialmente y que les vienen a ser sorpresivas en el momento de la ruptura.

Para empezar desde el momento de la celebración nace entre ellos un vínculo matrimonial que podrá ser suspendido por causa de separación matrimonial o disuelto por divorcio o el fallecimiento de cualquiera de los cónyuges.

El matrimonio no puede en ningún caso ni bajo ningún concepto estar limitado ni supeditado a término o condición por tanto el matrimonio es «un bloque» que puede estar vigente, o no, pero no un matrimonio a medias.

No se puede aceptar una parte de las consecuencias jurídicas de un matrimonio y otras no. El matrimonio es una institución con una serie de condiciones legales que desde la celebración del matrimonio se asumen íntegramente.

La decisión es la de casarse o no casarse, pero no cabe la opción de casarse en unas condiciones diferentes a nuestro cónyuges o cualquier otro matrimonio.

Cabe optar por un régimen económico matrimonial concreto u otro pero no nada mas respecto de los derechos y obligaciones matrimoniales que vienen determinados por la Ley.

Efectos jurídicos del matrimonio

Respeto y divorcio

A continuación analizaremos los efectos jurídicos, responsabilidad, derechos y obligaciones.

En tanto en cuanto ese matrimonio perdure entre las partes se irán creando, modificando y extinguiendo una serie de vinculaciones en cada paso de la vida común.

A buenas durante el desarrollo de la vida familiar parece que todos los propósitos son de paz y amor, pero en un gran porcentaje de los casos en el momento de la ruptura los cónyuges se informan de cuales son sus derechos. Es normal, el problema es no haberlos conocido antes y así poder haber desarrollado la vida familiar de una manera consciente y congruente.

Es necesario estar informados pero por respeto lo mejor es no tratar de exigir nuestros derechos y eludir en la medida de lo posible el cumplimiento de nuestras obligaciones matrimoniales. Todo matrimonio sabe cuales son exactamente las circunstancias, necesidades y aportaciones de cada uno de los cónyuges.

Lo justo es que ambos esposo tengan el suficiente respeto de si mismos y su marido o mujer que trate por todos los medios de llegar a un acuerdo sin imposiciones legales por indicaciones de abogados o mandato judicial.

De entre otros vínculos vamos a destacar en esta ocasión los siguientes:

Efectos vínculos paternofiliales:

Vínculos paternofiliales

Desde el nacimiento de un hijo ambos padres tienen la obligación de procurarle todo cuanto necesite, así como de atenderle hasta que pueda valerse por si mismos.

Durante el matrimonio ambos progenitores serán los obligados de manera indistinta de manera que la responsabilidad será común.

Hasta la mayoría de edad:

Patria potestad: La toma de decisiones esenciales para la vida de los hijos procurando en todo momento lo que le sea mas beneficioso.

Guarda y custodia: El ejercicio cotidiano de los cuidados necesarios. Se trata de la educación y crianza de los hijos en el día a día. La guarda y custodia en los casos de padres no separados será de ambos, y si media separación o divorcio legal se establecerá una custodia paterna, materna o compartida, con los momentos de visitas que correspondan.

Hasta la independencia económica los padres tendrán la obligación de sufragar todos aquellos gastos que sean necesarios tanto para su alimentación, vestuario, higiene y educación ordinaria así como gastos derivados de necesidades extraordinarias.

Evidentemente los padres tendrán las mismas obligaciones con independencia de que entre ambos progenitores exista matrimonio, o no. También existe la obligación de alimentos de hijos a padres en los casos en los que estos no pueden cubrir su necesidades y los hijos están en posibilidad de hacerlo.

Efectos vínculos patrimoniales :

Patrimonio

Desde el momento en el que dos personas solteras deciden contraer un determinado matrimonio entre ellos existirá una serie de vínculos patrimoniales que serán diferentes en cada caso.

Derechos y obligaciones:

Ya no existen como tal los derechos y obligaciones personales. No por estar casados tenemos que convivir, tener relaciones sexuales, cuidarnos, procurar el bienestar del otro, querernos en lo bueno y en lo malo y en la salud y enfermedad como se suele entender por pertenecer a principios de las celebraciones religiosas.

Dos personas casadas tienen los mismos derechos y obligaciones en su día a día que cualquier otra persona.

Si es cierto que se irán consolidando derechos como son los de la atribución del uso y disfrute del domicilio familiar, procedencia de una pensión compensatoria por existir desequilibrio entre los miembros del matrimonio.. etc.

Pero en resumen, ya no existe el abandono de hogar ni se debe de alegar casua en la separación o divorcio y es por ello

Créditos y deudas:

Los créditos y deudas de los esposos serán de titularidad de la persona que los constituya como punto de partida.

Si el régimen económico es el de gananciales será extensible a todo el patrimonio de deudas, derechos y créditos gananciales (no privativos del otro cónyuge).

En el caso de separación de bienes estrictamente cada cónyuge será el titular de sus propios créditos y deudas.

Desde nuestro despacho de abogados recomendamos a cualquier matrimonio el régimen de separación de bienes.

El régimen económico matrimonial:

Régimen económico matrimonial

Todo matrimonio tiene un determinado régimen económico, pero el problema es muchas veces los esposos no saben qué régimen tienen y cuál es su consecuencia y trascendencia jurídica.

Se trata de dos problemas diferentes:

  • Saber su régimen económico matrimonial: Saber qué régimen económico matrimonial nació con su matrimonio, haber tenido la posibilidad de cambiarlo en su día o en cualquier momento antes de la ruptura.
  • Saber las consecuencias legales del mismo: Una vez que sabe exactamente el régimen económico aplicable a cada momento del matrimonio saber que consecuencias legales tiene.

Régimen aplicable por defecto:

Por defecto en derecho común en España se aplicará el régimen de sociedad de gananciales, mientras que en Cataluña y Baleares así como en Comunidad Valenciana desde 2008 se aplicará por defecto el régimen de separación de bienes.

En cualquier momento los cónyuges pueden acordar un cambio de régimen económico matrimonial mediante el otorgamiento de las correspondientes capitulaciones matrimoniales. Caben destacar las siguientes apreciaciones adicionales:

Información de derechos y obligaciones económicas del matrimonio:

  • Antes de contraer un matrimonio ambos novios tienen patrimonios propios independientes.
  • Después de la separación, divorcio o fallecimiento de un cónyuge vuelven a tener domicilios propios e independientes al igual que cuando tienen el régimen de separación de bienes.
  • Un matrimonio separado que se reconcilia en toda España tendrá el régimen económico matrimonial de separación de bienes con independencia de cual lo fue durante el matrimonio.
  • Pueden realizarse tantos cambios de régimen económico matrimonial como los cónyuges consideren conveniente.
  • Para otorgar capitulaciones matrimoniales es necesaria la concurrencia del consentimiento de ambos cónyuges.
  • Cada cambio de régimen económico supondrá que los bienes y deudas derechos y obligaciones que se hayan creado, modificado o extinguido en ese periodo cuenten con la naturaleza del momento en el que se haya producido el hecho que lo constituya.
Todo lo que necesita saber sobre cuestiones de la economía familiar
Información derechos económicos del matrimonio

Quién puede casar en España

¿Quién puede casar en España?

Conforme a la Ley de Jurisdicción Voluntaria que ha permitido que los Notarios puedan celebrar matrimonios, los órganos y personas que pueden casar civilmente en España son los siguientes:

  1. Notarios.
  2. El juez encargado del Registro Civil y los jueces de Paz.
  3. El alcalde del municipio o un concejal en quien éste delegue.
  4. Responsable eclesiástico en caso de matrimonio religioso, que requiere que los trámites sean perfeccionados para su adecuada inscripción en Registro Civil.
  5. El funcionario diplomático o consular encargado del Registro Civil en el extranjero.

La manera más rápida para celebrar un matrimonio es el matrimonio ante Notario.

¿Por qué?

Por ser inmediato, sólo se debe de esperar el tiempo que requiera la Notaria para poder firmar, el retraso que tenga para asignar la firma del matrimonio, pero es la más rápida. Se podrá realizar en una u otra Notaria, la de su elección.

La celebración del divorcio ante Notario tiene un precio aproximado de 200 ó 300 euros. Incluso, si el en la Notaria en la que se solicita la celebración del enlace nupcial lo permite, se puede solicitar el desplazamiento del Notario al lugar elegido por la pareja, tendrá un mayor coste por el desplazamiento y la disponibilidad especial.

¿Quiénes pueden casar en España?

Los ya indicados podrán casar válidamente en España, eso sí, con efectos civiles: Juez, notario, un funcionario de Ayuntamiento (alcalde o concejal con dichas facultades), responsable eclesiástico (como se suele decir «por la iglesia» un «cura» o clérigo) y cargos de las embajadas y consulados de España en el extranjero (al ser embajada o consulado español, el matrimonio se considera celebrado en España).

CASARME EN ESPAÑA
Quien puede casar en España

Por supuesto, podrán casarse por la iglesia todo aquel que cumpla con los requisitos religiosos, estando supeditado a la inscripción civil.

Debemos de distinguir entre quién puede casar en España de dónde se realiza el primer trámite obligatorio para todo divorcio, la elaboración del expediente matrimonial.

Expediente matrimonial:

El expediente matrimonial se debe de realizar preceptivamente en el Registro Civil, para que una vez que lo tenemos aprobado, poder proceder a la celebración del matrimonio de la manera que se considere oportuna, que además se debe de comunicar evidentemente en la elaboración del expediente matrimonial.

El expediente matrimonial se debe de iniciar en el Registro Civil del municipio de residencia.

Hay algunos más lentos y colapsados que pueden tardar 3 y 4 meses y otros más ágiles que lo pueden resolver en 15 días o un mes.

Contraer matrimonio en España
Casarme en España

¿Quién o quiénes pueden casar en España?

¿Quién puede casar por lo civil en España?

¿Quién puede casar por lo civil?

¿Quién puede oficiar una boda civil?

Todos los indicados más arriba, menos los religiosos por la Iglesia: Cura, sacerdote o eclesiástico.

 

Dejarse influenciar por terceras personas

Dejarse influenciar por terceras personas en el matrimonio

Dejarse influenciar por terceras personas en el matrimonio:

El matrimonio debe de contraerse de un modo libre e incondicionado, sin ningún tipo de coacción o influencia, de modo que la decisión de separarse o divorciarse, debería ser exactamente igual, a pesar de lo cual, en la vida, existen múltiples circunstancias que nos hacen tomar decisiones que no son totalmente propias, sino en muchos casos provocadas por terceras personas.

Influencia de terceras personas

En lo que respecta a los matrimonios, son muchos los casos en los que el divorcio o la separación es provocada por la llegada de una tercera persona que entabla una relación de amistad o sentimental con uno de ellos, con o sin infidelidad, provocando la ruptura; o incluso personas, que tienen un gran poder de influencia directo (hermanos, padres, amigos, compañeros de trabajo… etc) y lo ejercen, o incluso personas que sin estar dentro del círculo directo de la persona, hacen intencionadamente, o no, presión en una determinada relación que se deteriora.

Terceras personas en el matrimonio:

La influencia de terceras personas suelen condicionar y comprometer el mantenimiento de matrimonios pues pasa de ser un matrimonio de dos personas ordinario a otro en el que pueden tener intervención, voz y voto más personas. Esto supone una gran distorsión relacional. Los principales son los siguientes:

  • FAMILIA: Hermanos, hermanas, tíos, primos, suegros, suegras, cuñados, cuñadas… etc.
  • NUEVA RELACIÓN: Ya sea sentimental, amantes, amigos íntimos…etc.

Y todos esos agentes perjudican la relación provocando la ruptura, o si ya se había producido la ruptura, haciendo que no se pueda tramitar por los cauces del mutuo acuerdo, y se tenga que acudir al proceso contencioso, por ello, trate de concienciar a su cónyuge de que su matrimonio es de dos, y nadie más debe de opinar ni inmiscuirse, a pesar de lo cual, en la práctica, en incontrolable, si lo de sean realicen una PROPUESTA DE ACUERDO DE DIVORCIO.

Dejarse influenciar por terceras personas
Terceras personas en el matrimonio

Separarse por una tercera persona:

Comuníquese directamente con su pareja, no deje que terceras personas estropeen su relación, sea claro, directo y respetuoso, de no funcionar acuda al asesoramiento profesional que corresponda, en ningún caso a la mediación o intervención de terceras personas con interés, amistad o enemistad con cualquiera de los miembros del matrimonio.

Separarse por una tercera persona es sólo la causa o motivo y deja claro que la relación no era lo que se quería. No hay que centrarse en culpabilizar a la tercera persona pues ha sido incidental que se produzca la separación por esa tercera persona, pero podría haber sido en otro momento por otra persona.

Dejarse influenciar por terceras personas en el matrimonio.