Debe saber que la mejor manera de divorciarse en España es de mutuo acuerdo pues reduce exponencialmente costes, tiempos y disputas. ¿Cómo divorciarse? A buenas, sin conflictos y sin litigios.
Si se pregunta de cómo divorciarse en España debe de tener en cuenta que de su actitud y su asesoramiento dependerá que sea amistoso o contencioso. Por ello debe de mantener una actitud mediadora y contar con un abogado de confianza y de esa manera potenciará las posibilidades de que el divorcio pueda ser consensuado y que se pueda llevar a la práctica de manera saludable.
El primer paso para divorciarse es buscar asesoramiento por medio de su abogado de confianza.
¿Cómo divorciarse en España? De mutuo acuerdo reduciendo la tensión con un asesoramiento conciliador y preventivo de conflictos presentes y futuros.
En esta guía para divorciarse en 2024 encontrará los pasos para divorcio en España.
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AYUDADMEIndice de Contenido
Requisitos y Documentación Necesaria
Los requisitos de un divorcio es que ya hayan pasado al menos 3 meses desde la celebración del matrimonio, que intervenga abogado y procurador (o notario en vía notarial) y
que se disponga de la documentación necesaria para poder divorciarse.
La documentación necesaria para poder divorciarse es el certificado literal de matrimonio, certificado literal de nacimiento de los hijos, certificado de empadronamiento y en caso de divorcio amistoso convenio regulador y en caso de divorcio contencioso todos los documentos que acrediten aquello que se está pidiendo como hechos controvertidos.
La documentación necesaria como requisito de cada divorcio deberá de ser valorada por el abogado que se encargue de la tramitación, pues a nivel individualizado en cada proceso convendrá un tipo de estrategia y guía procesal.
Tipos de Procedimientos de Divorcio
Cuando una pareja decide poner fin a su matrimonio, es importante conocer los distintos tipos de procedimientos de divorcio disponibles en España. Estos procedimientos definen la forma en que se llevará a cabo el divorcio y las implicaciones legales para ambas partes. En España, existen dos tipos principales de procedimientos de divorcio: el divorcio amistoso y el divorcio contencioso. A continuación, te explicamos en qué consiste cada uno de ellos y cómo se diferencian.
1. Divorcio Amistoso
El divorcio amistoso, también conocido como divorcio de mutuo acuerdo, es el procedimiento más rápido y sencillo. En este tipo de divorcio, ambas partes están de acuerdo en los términos de la separación, lo que facilita enormemente el proceso.
Características principales:
- Acuerdo entre las partes: En un divorcio amistoso, los cónyuges llegan a un acuerdo sobre todos los aspectos relevantes del divorcio, incluyendo la custodia de los hijos, la pensión alimenticia, el régimen de visitas, y la división de bienes comunes.
- Convenio Regulador: Es necesario que las partes redacten y firmen un convenio regulador, un documento que recoge todos los acuerdos alcanzados. Este convenio se presenta ante el juez junto con la demanda de divorcio.
- Rapidez y menor coste: Debido a que no hay disputas que resolver, el proceso es más rápido y menos costoso. Además, el hecho de evitar un juicio prolongado reduce el estrés y las tensiones entre las partes.
- Intervención judicial limitada: La intervención del juez se limita a revisar el convenio regulador para asegurarse de que cumple con la legalidad y protege los intereses de los hijos, si los hay. Una vez aprobado, el juez dicta la sentencia de divorcio.
2. Divorcio Contencioso
El divorcio contencioso es el procedimiento que se sigue cuando no existe un acuerdo entre los cónyuges sobre los términos del divorcio. Este tipo de divorcio es más complejo y suele implicar un proceso judicial más largo y conflictivo.
Características principales:
- Desacuerdo entre las partes: En un divorcio contencioso, los cónyuges no logran ponerse de acuerdo en cuestiones clave como la custodia de los hijos, la pensión alimenticia, el régimen de visitas, o la división de bienes. Como resultado, es necesario que un juez tome estas decisiones.
- Proceso judicial: El proceso comienza con la presentación de una demanda de divorcio por una de las partes, a la que la otra parte debe responder. A continuación, se celebra una audiencia en la que ambas partes presentan sus argumentos y pruebas.
- Mayor duración y coste: Debido a la complejidad del proceso y la necesidad de una intervención judicial más intensa, el divorcio contencioso suele ser más largo y costoso que el amistoso. Además, el proceso puede ser emocionalmente agotador para ambas partes.
- Sentencia judicial: Finalmente, será el juez quien, tras evaluar todas las pruebas y escuchar a ambas partes, dictará la sentencia que establecerá las condiciones del divorcio, incluyendo la custodia de los hijos, la pensión alimenticia, y la distribución de bienes.
Consideraciones Finales
Elegir entre un divorcio amistoso y uno contencioso depende en gran medida de la relación entre los cónyuges y su capacidad para llegar a acuerdos. Siempre que sea posible, el divorcio amistoso es la opción preferible por su rapidez, menor coste y la posibilidad de reducir tensiones. Sin embargo, en situaciones donde no se pueden alcanzar acuerdos, el divorcio contencioso es la vía adecuada para garantizar que todas las partes implicadas reciban un trato justo.
Es recomendable contar con el asesoramiento de un abogado especializado en derecho de familia para guiar el proceso y asegurar que se protejan los derechos de ambas partes, así como los de los hijos, si los hay.
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AYUDADMEPasos para Iniciar el Proceso
Los pasos para iniciar un proceso de divorcio son los siguientes:
- Concertar el asesoramiento ya sea con abogado privado o de oficio.
- Recopilar la documentación necesaria.
- Confirmar si es posible el acuerdo o tendrá que tramitarse por vía contenciosa.
- En caso de divorcio amistoso presentar la demanda y ratificar la petición cuando así sea requerido por el Juzgado. En caso de divorcio contencioso presentar la demanda y acudir a vista judicial en el día y hora señalado por el Juzgado al efecto.
- Recibir la notificación del decreto o sentencia de divorcio por medio del procurador.
- La anotación del divorcio en el Registro Civil la efectuará el Juzgado.
Consideraciones Legales y Financieras
Las consideraciones legales a tener en cuenta en el proceso de divorcio es que aunque para contraer matrimonio sea necesario el consentimiento de ambos miembros de la pareja, para terminarlo por divorcio será suficiente la decisión de uno o de los dos.
El derecho al divorcio es que hace realmente libre al matrimonio, pues las personas cuando se casan saben que existe la posibilidad y derecho a divorciarse. Otra cuestión es que legalmente ninguno de los cónyuges tengan obligación de aceptar la propuesta amista de divorcio del otro cónyuge, pero por lo contencioso no podrán evitar la declaración de la disolución del matrimonio por divorcio.
Por ello, en el plano legal, ambos cónyuges tienen derecho al divorcio, pero no tienen derecho al divorcio amistoso, pues el otro puede oponerse sin ni tan siquiera tener que dar explicaciones. En este tipo de situaciones lo más justo es tener predisposición al acuerdo amistoso.
En el ámbito financiero la familia es una unidad que con el divorcio pasa a regularse y se deben de establecer pautas que determinarán el alcance y delimitación económica y patrimonial de los cónyuges. Tanto derechos como obligaciones familiares.
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AYUDADMEConsejos Prácticos para el Proceso
De entre los requisitos para divorcio en España el mejor consejo es que no se preocupe sobremanera en los detalles técnicos, pues de las cuestiones jurídicas se encargará su abogado. Lo que debe de cuidar usted es la relación persona con su cónyuge sobre todo en los casos en los que existen hijos comunes de cara a mantener un entorno familiar saludable después de la separación.
El mejor consejo práctico es centrarse en mantener bajo control la tensión familiar. Mantener las formas y prevenir conflictos será el mejor consejo, pues la mayor parte de divorcios se complican y después los perjuicios más graves se derivan de la judicialización innecesaria. El consejo práctico es no complicarlo, no meter la pata, no entrar en guerras que no tienen sentido.
Los cónyuges que se divorcian no son partes enfrentadas, sino miembros de una familia que deciden separarse y entre los que siempre existen opciones prácticas justas y acertadas que pueden permitir que ninguno pierda y todos los miembros puedan continuar con sus respectivas vidas después de la separación de manera integrativa y no excluyente.
Recursos y Apoyo
Entre los recursos y apoyo necesario para todo proceso de divorcio debe de estar un abogado para reformar el ámbito legal y un psicólogo para reforzar el ámbito mental.
Esta demostrado que el divorcio puede ser tan traumático que incluso en el momento los cónyuges no se dan cuenta de lo difícil que es.
No contar con los recursos y apoyos necesarios puede hacer que no se tenga una consciencia real de las circunstancias familiares y que se acaben tomando malas decisiones.
Una mala decisión en un divorcio propiciada por la falta de recursos externos y apoyo del entorno puede llevar a grandes errores que supongan que un divorcio que podría haberse gestionado de una manera normalizada acabe en un enfrentamiento sin sentido en el que pierden todos los miembros de la familia.
Todos los recursos y apoyos constructivos para el bienestar de las familias serán bienvenidos. Pero el mejor recurso y apoyo será el de no crear conflictos ni problemas donde no los hay.
Los propios cónyuges son los que por sí mismos suelen complicar las cosas debido a una mala actitud, falta de predisposición al entendimiento o por dejarse llevar por personas que en ocasiones nos aconsejas cosas que nos ayudan a mediar, sino que potencian la falta de entendimiento y deberíamos de evitar, pues supondría prevenir gran parte de los problemas.
Tome la decision de adoptar a esta mujer con sus dos hijos adolecentes por afecto a ella, pero resultaron ser muy nefastos y mal educados…me dieron inclusive 3 infartos por los corajes que hacia con ellos y callarme de no reprenderlos por que se molestba mi mujer, hoy han pasado 13 años y continua lo mismo. me case con mi mujer cuando ellos cumplieron la mayoria de edad para ya no tener compromisos con ellos y fue lo mismo, siempre siendo ellos las prioridades el 28 y ella 34, siguen viviendo en mi casa y yo sigo siendo el arrimado de siempre….mi mujer y yo solos nos llevamos muy bien pero en cuanto llegan sus hijos cambia.he tratado de alejarme de ellos pero no quiero dejarla expuesta a sus hijos que nunca han visto por ella. pero ya he tomado la desicion de divorciarme, tengo 73 años y mi tiempo se esta desperdiciando mucho con este problema.
Buenas tardes
Su situación es muy clara y lo describe perfectamente. Ha apostado por un matrimonio incluso incluyendo como familia suya a los hijos de su mujer, pero la relación es disfuncional y distorsiona la pareja. La edad que tienen de 28 y 34 años ya sería como para intentar que se independizaran o desarraigaran de la relación de pareja y matrimonio, pues de no ser así como bien dice la relación entre el matrimonio se puede seguir deteriorando.
La decisión es muy personal y existen servicios de mediación y terapia de pareja que puedan ayudar a mostrar la actitud más adecuada que es lo único que pueden cambiar y con ella tratar de corregir la relación e interferencia de los hijos de su pareja. Es muy complicada la situación, pero valorando la situación actual con infinidad de cuestiones a tener en cuenta, lo mejor es antes de tomar una decisión buscar ayuda en psicólogos de pareja.
Mucho ánimo y fuerza
yo pienso que no debe haber segundas oportunidades
Después de las relaciones que han terminado por ser inviables o insostenible, totalmente de acuerdo, no debe de haber segundas oportunidades a no ser que exista un cambio real que haga que la relación sea posible saludablemente, lo cual es muy difícil.
Muchas gracias